La tarde antes del 10 de julio.
Todo estaba yendo sobre lo previsto. Había descansado, no estaba nerviosa (sí, muy emocionada de poder estar en la línea de salida) .
En la playa del lago Lucy y yo hablamos un poco con una española, yo no me quiero distraer demasiado y me alejo de la conversación. Faltaban muy pocos minutos para las 7:00. Lucy y yo nos abrazamos contenidas, está a punto de invadirnos la emoción (yo ya me hubiera puesto a llorar sin reprimirme, pero no era momento). Nos deseamos mucha suerte y confirmamos las dos que nos volveríamos a ver en la meta.
7:00 a.m. Dan la señal de salida y nos lanzamos al agua. Tengo muy presente a Tere en mi mente, hace una mañana preciosa, a medida que voy nadando tomo auténtica conciencia de que estoy en el IM de Zurich, ya no es un entreno más ni nada. Por fin llegó el día y me dispongo a disfrutar de cada brazada pero intento no abandonarme en el goce de estar ahí. Disfruto.
Salgo de la primera vuelta y veo que me he recreado un poco demasiado, 48 min en la primera vuelta de 2000 m. Veo a los del Gavà que me animan a seguir, "Vas muy bien Lourdes" !!!!! En la segunda vuelta empiezo a ver en el horizonte como las nubes gris oscuro van tapando las montañas, "por favor que no llueva" aunque era muy improbable que no pasara.
Salgo del agua y veo a Curris que me da las gafas de sol que me había olvidado en el hotel. 180 km con lentillas y sin gafas, la verdad, me hacían mucha falta.
Iván me sonríe y Auri me anima, me voy contenta a los boxes.
Todo está yendo bien, es un día muy largo y pueden pasar muchas cosas, con calma que hay tiempo, pero sin pausa.
Curris esperando mi salida del agua
Hago la transición a la bici, salgo de boxes y empiezo con la serena confianza de realizarla en 7h30 sin dudarlo ni un segundo. El Garmin empieza a pitar sin cesar para comunicarme que la memoria está completa y que he de borrar información. Apago el Garmin, lo reinicio, intento borrar, no veo bien y pienso que lo necesito más que nunca para saber cómo voy. Calculo el tiempo y los km que han podido pasar hasta que de nuevo tengo el Garmin funcionando debidamente.
El día anterior Curris había hecho el recorrido en bici para explicarme exactamente con qué me iba a encontrar en cada km. No hizo el énfasis suficiente señalándome que del km 52 al 62 eran 10 km de subida, subida y pienso: " Hombre!! Curris, esto es más que la Rabassada!"
Un recorrido precioso. "que suerte tengo de poder hacer el IM aquí".
Llego al avituallamiento del km 62, cojo mi comida, hago un pipí rapidísimo y vuelvo a subir a la bici.
Me saluda una valenciana que también había parado y bajado de la bici. Su nombre era Beatriz.
Al acabar la primera vuelta, veo que me he pasado por muy poco de las cuatro horas, ¿qué iba a representar esto? Calculo, al ver a Iván, Auri y a Dani les comunico mi preocupación de no llegar al corte. " Vas bien Lourdes, llegarás" Entre que el Garmin no estaba iniciado desde el comienzo de la bici, los datos no los tenía claros, empezaba a notar un poco el chapuzón de casi 4km. No pienses en eso, concéntrate y dale a la bici" Estáte preparada para esos 10 km de subida, enseguida vendrá el avituallamiento, podrás parar y seguir. A medida que pasaba el tiempo, veía que el corte se me echa encima y cada vez se alejaba más la posibilidad de parar en el avituallamiento.
Dos gotas, una detrás de otra me indicaron que a lo que más le temía había llegado y con fuerza. Empezó a diluviar, viento en contra al inicio de los 10 km de subida constante. Pensé que dentro de la mala pata de la lluvia, era de subida y no de bajada, con un poco de suerte a la bajada ya habría remitido.
"Tengo mucho pipí y no tengo tiempo de parar, no puedo dejar de beber, he de hidratarme, si no lo pagaré caro en la maratón. "¿Pero llegaré? ¿Dónde era el corte? ¿Cuánto tiempo tengo? Tengo mucho pipí, no dejes de beber.
"Desde luego con esto sí que no contaba, descalificada y retirada en el tramo bici".
Llego al avituallamiento, "¿Qué hago, paro rápido? ¿Cuánta comida me queda? Pero si tengo mi kit supervivencia aquí, contaba con ello para estar perfecta en la maratón, ¿paro o no paro? ¿Qué maratón? si no vas a llegar. Bueno, oye, te queda una barrita y un gel." Desde la lejanía oigo una voz que me grita "La de Gavá, corre que nos cierran el corte" !!!!!. Era Beatriz, la valenciana con la que había coincidido en el mismo punto. No paro. Se lanza al descenso, si ella va, yo también. Ella va más rápido en las bajadas y yo en las subidas, haciendo acordeón nos vamos encontrando, en las bajadas la perdía pero en las subidas la encontraba de nuevo.
Había dejado de llover y el sol salía con fuerza de nuevo. Estaba desorientada, no sabía en qué circunstancia me encontraba respeto al corte.
Aparece un motorista por detrás, "zas!!!!! me han pillando ya, mierda, no he llegado al corte!!!! Esto se ha de afrontar con serenidad, no has podido y punto Lourdes, que le vas a hacer, ha sido así. Lástima. Sigo pensando y me digo que hasta que a mí nadie me diga lo contrario yo sigo en carrera, no ha venido nadie a decirme nada de momento, ¿verdad? pues tira para adelante y sigue, sigue hasta que no haya noticias de lo contrario."
Me giro y le pregunto al motorista dónde es el corte y cuánto tiempo falta. Faltaban 25 km y menos de una hora para el corte. Con una sonrisa amable me dice que lo estoy haciendo muy bien, cree que lo puedo conseguir pero no puedo aflojar. Desde ese mismo instante, cuchillo en boca, pienso que tengo una pequeña oportunidad para llegar al corte y que la he de aprovechar . Salgo disparada a hacer un sprint de casi 25 km. "Sigue Lourdes, hoy es el día, no mañana, ni pasado, es hoy, sigue, sigue, no está perdido, sigue, sigue. El motorista no me abandona y me informa cada 10 minutos a cuánto estoy del corte y del tiempo que todavía dispongo.
Curris después de haber estado conectado a la web y ver sin remedio que no llegaba al corte, me prepara una bolsa, con ropa limpia, zapatos secos y el recogedor para recoger mis restos abandonados al desaliento. (La bolsa era la de la ropa sucia del hotel). Bajó a la zona de boxes para esperarme allí. La web se actualizaba con bastante retraso, en su interior más profundo había una pequeña esperanza.
"Si no pasa a las 16:35, no llega al corte." Cada minuto que pasó esperándome fue una agonía.
Yo no solté el cuchillo, por fin pasé delante de Curris, me gritó y animó mucho, apenas lo entendí pero sí entendí su mirada, "Lourdes, aún lo puedes salvar, estamos allí! "Curris salió disparado a ver al juez de carrera. Mi mujer acaba de pasar no llega por 5 minutos, la dejaréis pasar, lo está dando todo, va muy rápido y acabará la maratón.
Le pregunto al motorista, veo que está hablando por su micrófono, está atento a lo que le dicen. Me mira y me confirma que siga y me anima a seguir así, You are doing very well, keep going! ¿Me estará diciendo la verdad? Llegamos a la zona del corte y me confirma "You haved made it" go, go, go!! Qué ganas de abrazarlo, me sigue hasta boxes, nos damos las manos, le doy las gracias y le digo que lo veré en meta.
Entrada en boxes, detalle del juez mirando el reloj.
En boxes están todos eufóricos, pero con la tensión de que tenía 5h45 para hacer la maratón. Pienso que en mi primera maratón hice 4;40 y fui muy lenta, tengo posibilidades pero no me puedo relajar, estoy cansada del sprint de 25 km , la tensión de 90 km sin saber si llegaba o no al corte, tenía mucho pipí, los pies se me habían acalambrado durante 60 km, me merecía un descanso de un minuto.
Inicio la maratón con 5h40 para que dieran las 23:00, hora en que finalizaría el IM.
Qué batalla!!! ¿Ahora una maratón? Tú contra tu cabeza. Me planteaba varias cosas:
- Si has llegado hasta aquí, es porque tienes la oportunidad de acabar el IM.
- No te duele nada Lourdes, no hay una sola parte del cuerpo que tengas que soportar con dolor (mira cómo van los demás). Los calambres al bajar de la bicicleta ya habían desaparecido.
- Hoy es el día, no mañana, ni pasado, hoy hay que correr. La única solución es correr, has de correr, no empieces con que y si camino un poquito y corro un poquito, no llegarás, has de correr, hoy hay que correr. Intenta coger un ritmo y corre. En el km 4,5 me dan la primera pulsera, no entiendo nada, ¿yaaa, la primera pulsera? Se han equivocado, yo no tengo tiempo de explicarles que se han equivocado. ¿O, no? ¿Cómo se van a equivocar los Suizos? No pienses más, será así y punto.
Un poco sin darme cuenta me planto en el km 23 y llego a la zona donde Curris me esperaba a cada vuelta. ¿"Cómo vas? "Acompáñame unos metros Curris, cuéntame algo, ¿qué dicen los de Barcelona?, cuéntame algo."
Esos metros que le pedía a Curris que me acompañara se convirtieron en 11 km.
La imagen de Curris me producía una ternura inmensa, vestido de calle, con zapatos de calle, sin calcetines, con una bolsa de ropa sucia de hotel. (Yo no sabía que dentro de esa bolsa estaba la derrota que había preparado con todo el cariño del mundo, ropa limpia (vendrá empapada y destrozada) y no querrá ir al hotel hasta no ver como acaban todos los de su club.)
Curris está operado hace 20 años del menisco, le duele la rodilla y ha de ser operado en breve. No corre nunca, lo intentó cuando yo empecé a hacer triatlón pero fue imposible, le dolía mucho. 11 km corriendo con la bolsa. "Si él corre yo también y no pararé," hasta que me empecé a encontrar mal de los nervios.
"Tengo caca Curris pero no podemos parar, no puedo perder tiempo."
- No te preocupes, es mejor parar, ve al lavabo y podrás correr mejor, si paramos es para mejor, así no puedes seguir. No te preocupes, salió corriendo para adelantarse a coger dos esponjas del avituallamiento, no me voy Lourdes, me adelanto, ¿vale? para reservarte el próximo lavabo. A 200 m, lo vi de nuevo, esperándome con la puerta abierta y una esponja en la mano, "ya está, ya puedes entrar," lo había limpiado y todo lo feo del WC lo había tapado con papel para que no lo viera.
"He de llegar, quiero llegar, quiero pasar por el arco, quiero mi medalla".
Pienso que Curris ha de descansar, que ha corrido mucho y que debe estar hecho polvo, en ningún momento da señales de queja o de no poder más, pero le digo que me espere en el punto donde estábamos (al lado de los boxes) como he de volver a pasar por esa misma zona, que me espere a que yo vuelva a pasar, así él podría descansar y yo medir mis fuerzas para seguir sola ya que Curris no iba a correr su primera media maratón en el IM en Zurich. (Con la bolsa de ropa sucia del hotel en brazos).
Km 33 aparece Iván. ¿Pero cómo puedo tener tanta suerte? Su aparición fue mágica, como un ángel que baja, te da la mano, te tranquiliza y te da nuevo confianza.
Se ve que Curris no podía más, le tuvieron que dar Coca Cola para reanimarlo un poco. Iván no dudó en sustituirlo.
"¿Cómo vas? "
Empezó a contarme cosas y a distraerme.
No comas nada más sólido Lourdes, al llegar al avituallamiento cogió un vaso de coca cola y uno de agua. Así corrió los 9 km que faltaban. "¿Qué más puedo pedir? Un marido que ha corrido 11 km con una sonrisa, te limpia los WC antes de que entre, está tu entrenador que también le duele la rodilla, feliz y distrayéndote con dos vasos uno en cada mano para hidratarte en cada momento que es necesario y no caer en redondo, tienes a Lucy a Alfons, a Joan, a Auri, a Dani, a David, a Gerardo, a todos a sus familias, a media Barcelona pendiente de un hilo, que si llegas o no llegas, tienes al mejor club del mundo, transmitiéndote todos los ánimos." Carlos, Cristina, Enric, las miradas de complicidad en la carrera.
"He de llegar, quiero llegar, quiero pasar por el arco, quiero mi medalla".
Empezamos a hacer cálculos, quedan tantos km, "¿a qué ritmo vas en el Garmin? Creo que lo puedes conseguir, allí estamos Lourdes."
Sigue una dura batalla en la cabeza. Intento animarme pensando que soy una privilegiada ya que no tengo dolor en ninguna parte del cuerpo, sigo corriendo.
Iván me tantea en un instante que paro y le digo: " un momento, la cabeza, la cabeza Iván"!!!! Faltan tres km para la llegada.
"Lourdes, si llegamos a las 23:03 estará igual de bien, lo habrás conseguido igualmente"
!!!!!!! ¿¿¿¿¿Pero qué me está diciendo??????!!!!!!
Iván, eso NO, quiero mi medalla y quiero pasar por el arco, Iván!!!!!!!
Tuvo claro que aguantaría los 3 km restantes.
Veía que en cualquier momento se me podía escapar de las manos y eso me produjo mucha tensión. Quería llegar, las pulsaciones se me dispararon y respiraba como si corriera a 4:30 m/km
La estrategia de Iván fue maestra.
Lourdes, despeja tu mente, no pienses en nada, ni el tiempo , ni en lo que falta, nos damos un homenaje caminando 20 seg y corremos 1 minuto, así lo hicimos hasta el final.
Curris, Alfons, Lucy, Laia, los padres de Laia, los padres de Alfons, todos estaban esperándome a 1,5km y medio de la meta. Hasta que no aparecimos en el horizonte Curris y todos estaban en máxima tensión. Aquí sí que pensó Curris, "como no llegue, la mato, lo tiene ya."
Por fin aparecimos en el horizonte oscuro y Curris corrió hacia nosotros, " Lo tienes Lourdes, de verdad que ya lo tienes" todos corrieron hacia nosotros con gritos por todo lo alto de ánimos. Máxima tensión, yo no me creía que estuviera a 1,5 km de la meta, preguntaba el tiempo, la distancia, me juraban que era verdad. Me contestaban pero no registraba lo que me decían, Iván pidió silencio, mis pulsaciones eran muy difíciles de bajar, "respira Lourdes, baja pulsaciones, sólo piensa en esto, vamos, corremos un poco y caminamos 20 seg para bajar pulsaciones, bajamos pulsaciones.
Ya lo tenemos.
" No veo el primer arco, dónde está, cuánto falta. "Está aquí, aquí !!! de verdad Lourdes, lo ves?
"Es verdad, es verdad." Lo vi.
Curris entregó la bolsa de ropa sucia del hotel con la derrota a alguien del grupo, me cogió de la mano y entramos juntos. Vimos el reloj y quedaban cuatro minutos para las 23:00 mientras hacíamos el zic zac de entrada, al pasar por las gradas sentimos que estaban llenas y la gente no paraba de gritar GO GO GO GO GOOOOOOOOOO!!!
20 fotógrafos a la llegada, un ramo de flores, la medalla y la famosa frase "Now you are an IRONMAN"
ESPECTACULAR!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Como si hubiese sido la ganadora.
Nunca volveré a tener una llegada así, fue tan y tan emocionante que no tengo palabras más que de agradecimiento hacia muchas personas.
Curris, la suerte de tenerte a mi lado nadie se la puede imaginar. Eres un pilar firme que no tiembla, no duda, nunca haces grandes promesas que no cumplirás pero siempre, siempre que miro hacia atrás, estás allí, me puedo dejar caer con la plena confianza de tu apoyo incondicional, discreto y con el máximo respeto.
Iván, aún recuerdo el día que buscaba entrenador. Puse en Google: entrenador personal y salió tu nombre, Iván Herruzo. Que apellido tan diferente, no lo había oído nunca. Bueno va, le escribiré a este, a ver qué tal?
¿A ver qué tal?
Gracias por haber confiando desde el minuto uno en que podía hacer el IM. Tu propuesta era arriesgada, los dos lo sabíamos, pero la ilusión de prepararlo y poder tener la oportunidad de vivirlo hizo que nos pusiéramos manos a la obra, trabajando cada día, mimando cada momento y hemos tenido la máxima recompensa.
IVÁN !!!!!!! SOMOS FINISHER EN ZURICH, SÍÍÍÍÍ, LO HEMOS CONSEGUIDO!!!!!!!!!
Fantástica Lucy, eres la mejor!!!!!!!
GRACIAS
Tere, cuánto esfuerzo has puesto en enseñarme a tener fuerza. No he hecho un buen tiempo en natación, pero te puedo asegurar que lo he disfrutado al máximo. Por primera vez, el tramo agua ha sido una gozada y me quedará siempre el recuerdo de pensar que eso lo disfruté y mucho, por primera vez. Siempre el agua había sido un mal trago que debía pasar. Ya no tengo miedo!
Un millón de gracias, Tere.
Camila y Voba, sin palabras, que voy a decir de mis hijos que han estado allí, animando en cada momento. Sois los mejores!!!!!
Por supuesto las gracias a to@s , tod@s los que sabéis que habéis estado allí aunque no estéis en la foto.
IMPAGABLE.
MUCHÍSIMAS GRACIAS.
Para rematar, dos de mis mejores amigas y mis super cuñados me dieron la sorpresa de esperarme en el aeropuerto!!!!! Al acabar el IM, dije que no haría otro, pero con todo este despliegue de cariño, repito!!!!
P.D.
Seguiré con el blog, muchas cosas por contar, ¿Por qué no me ha dolido absolutamente ni un músculo del cuerpo? Han pasado dos días y no he tenido ninguna agujeta. La alimentación ha sido fundamental en esta preparación.